¡Wow! MinHo pensó ¿Era una experiencia para abrir realmente
los ojos o qué? Aunque el mobiliario era razonable comparado con algunas de las
piezas de alta calidad que el vendedor le mostró. Mil quinientos dólares por
una recamara entera igual que el costo de un solo sofá de dos plazas tardaría
hasta ocho semanas para ser entregado.
-Gracias -finalmente
le dijo al vendedor - Pero creo que será mejor que espere hasta tener las
dimensiones de las habitaciones.
-Muy buena idea. No quieres enamorarte de algo solo para
descubrir que no cabe. Aquí está mi tarjeta. Por favor, regresa a vernos.
Salió de la tienda y se dirigía hacia el lugar donde había
estacionado el Versa cuando su teléfono comenzó a sonar, “Soy tu marioneta”.
Por supuesto que era ChangMin. MinHo estaba casi sin aliento mientras sacaba su
celular del bolsillo y tocó la pantalla.
-ChangMin, hola ¿Cómo está todo?
-Podría estar jodidamente mejor.
MinHo nunca había oído a ChangMin tan furioso. Antes de que
pudiera preguntarle si quería hablar de eso, ChangMin gruñó.
-¡No fue un ataque al corazón!
-¿Disculpa? Entonces, ¿qué?
-Fue un jodido caso de indigestión. Pero es una de esas
situaciones de 'oh, eso es bueno, no, eso es malo'. Tan inconveniente como ya
era, se volvió en una maldita buena cosa.
-¿Ah?
-Los médicos descubrieron que mi idiota padre es
en realidad una bomba de tiempo andante. Sus arterias están obstruidas, el lado
izquierdo de su corazón apenas si está haciendo su trabajo, su colesterol está
por las nubes, uno de sus riñones está dañándose, y ni hablar de su nivel de azúcar
en la sangre. Añadido a esto, él necesita que le realicen una mierda de
procedimientos.
MinHo nunca había oído a ChangMin maldecir, y ahora lo había
hecho varias veces en menos de un minuto - Lo siento mucho.
Pero ChangMin no pareció oírlo. - Papá no los quiere, y mamá
sólo se sienta junto a la cama sin decir nada. YooChun y yo hemos hablado con
el Jefe de Cardiología, y no hay nada que podamos hacer si papá se niega a que
lo traten.
-¿Cuál es el pronóstico?
-No es bueno, aunque mi padre se niega a creerle a sus médicos.
Está seguro de que ellos sólo están tratando de hacer dinero con él. YooChun
está tratando de hablar con él para que por lo menos acepte tener una enfermera
en casa, es más probable que escuche a YooChun que a mí pero insiste en que
mamá puede hacerse cargo de él.
-¿Hay algo que pueda hacer para ayudar?
-No, pero gracias. ¡Espera! Envíame el expediente de Bronson
por FedEx. Puedo intentar trabajar un poco mientras esté aquí haciendo girar
los pulgares.
-¿Cuándo lo quieres? Puedo armarlo y colocarlo en la caja para
FedEx en el vestíbulo.
-No quiero apurarte.
-No lo haces. Sólo estoy a diez minutos del trabajo, y puedo
regresar y enviártelo ahora.
ChangMin se quedó en silencio por un momento, y cuando habló,
sus palabras fueron cortantes - ¿Aún no estás en casa? ¿Dónde
estás?
-Acabo de dejar Muebles Finos Winchell. Quería ver si podía
conseguir una buena oferta, pero maldición, ChangMin, tardarán ocho semanas
para entregarlos.
-¿Por qué eso es un problema?
-¿Dónde voy a dormir?
-Creo que te invité a quedarte conmigo.
-Sí, por unos pocos días. Pero entonces tuviste que irte a
Miami, y estamos hablando de ¡Dos meses!
-Aparentemente, yo no planeé esto. Quiero que te alojes en
mi departamento hasta que encuentres un lugar en el que estés feliz.
.Tu... uh... ¿En serio? No quiero causarte inconvenientes.
-Has visto el tamaño de mi departamento. No me molestarías
en lo más
mínimo. ¿Eso está arreglado?
MinHo no quería decir que no, pero ¿Cómo iba a decir que sí?
Si él estaba constantemente caído, ¿Podría aumentar el riesgo de que se cansara
de rescatarlo? JinKi se había cansado. Luego tuvo a Nichkhun. Y estaban muy
lejos de ser tan importantes para él como lo es ChangMin. Se mordió el labio
inferior, preguntándose cómo responderle.
ChangMin debió de haber tomado su silencio como un acuerdo -
Ahora dime, ¿Con cuánto te sentirías cómodo gastando en muebles?
Aliviado de no haber tenido que responder, hizo un pequeño cálculo
rápidamente -.Creo que... ¿Diez mil? - A decir verdad, incluso eso lo ponía
nervioso, pero estaba bastante seguro de que sería más que suficiente para amueblar
una casa con seis habitaciones.
-Ten en cuenta que también necesitaras electrodomésticos.
-Oh, mierda, ni siquiera pensé...
-Escúchame. Si la señora Jeong encuentra algo que te guste,
has una oferta. Voy a llamar a mi abogado y decirle que te he autorizado a
hacer eso.
-¿Por cuánto? ¡Esa casa que fuimos a ver era de algo más
que un cuarto de millón de dólares!
-Creo que 500 debería ser un buen tope, yo…
-Quinientos mil. ¿Estás loco?
ChangMin contestó - No, yo… - .tosió ligeramente- iba a decir que si encuentras algo que
realmente te guste, no pondría objeciones si es un poco más
caro.
-¿Qué tan caro? - MinHo preguntó con suspicacia.
-¿Setecientos cincuenta?
Era algo bueno que el carro estuviera allí. MinHo se desplomó
contra él, tratando de recuperar el aliento. No tenía la menor intención de permitir
que la señora Jeong le mostrara una casa tan cara. No había necesidad de ser
codicioso. Tenía lo mejor, estaba durmiendo con el hombre al otro extremo de la
línea. Con eso más o menos resuelto, regresó al archivo que deseaba ChangMin.
-ChangMin, necesito la dirección de dónde quieres que llegue
el expediente Bronson.
-Jesús, yo ni siquiera...- ChangMin se oía cansado - Ha sido
una perra de día, y no estoy pensando con claridad. .Recitó la dirección.
-¡Espera! ¡Espera! - Sacó una libreta y un bolígrafo - Está
bien, dímela
de nuevo.
ChangMin repitió la dirección - Ese es mi hotel.
-Está bien. - MinHo terminó de apuntar - Lo tengo.
-Entonces... ¿Cómo están las cosas allá?
-Me alegro de que me acordaras. Recursos Humanos cree que la
señora Hwang sería perfecta como tu secretaria ejecutiva. He hablado con ella,
y tengo que estar de acuerdo. Sin embargo, tengo la sensación de que el señor
Nelson no va a estar feliz con eso.
-Acerca de Nelson. ¿Qué le hiciste?
-¿Yo? Agacho la cabeza en el pasillo tan pronto como lo veo
venir.
-Bueno, él me llamó esta mañana e insistió en que te
despidiera.
-Lo siento mucho Eso era lo último que necesitabas - ¡Ese
hijo de puta! ¡Y después de que le dije cómo estaban las cosas con el padre de
ChangMin! - Entonces ¿Qué vas a hacer?
-Nada, porque ya te dejé ir.
-Creo que él tiene a alguien en mente para ser tu secretaria
ejecutiva.
-Entonces es una buena cosa que no vaya a obtener el puesto.
-Y el señor Nelson va a ser aún más infeliz por eso.
-Él parece que tiene una erección por ti.
-Oh, amigo, eso es… ¿Te das cuenta de que ahora tengo
que lavarme el cerebro con lejía?
ChangMin se rio por primera vez esa noche, y MinHo estaba
contento de haber conseguido esa respuesta de él.
-Entonces, dime, aparte de volver loco a algunas personas y
buscar muebles, ¿Qué has estado haciendo?
-¿En las veinticuatro horas desde que te vi? Fui de nuevo a
tu departamento desde el aeropuerto, hice la cena, y me fui a la cama. Esta mañana
tomó un taxi al trabajo, y así estuvo mi desenfrenada y excitante vida... -Sin
ti…- Voy a buscar ese expediente y regresaré a tu casa, y haré la cena. Me bañaré,
me enjuagaré y lo repetiré.
-Desearía estar contigo.
-¿Lo deseas? - MinHo repentinamente estaba duro…- ChangMin…
-Cualquier lugar tiene que ser mejor que esto.
-Y-Yo creo que sí. - Y así su erección desapareció. ChangMin
estaba cansado. No había querido decir nada con sus palabras.
-Escucha, tengo que irme, MinHo.
-Está bien. Voy a hablar contigo mañana por la noche, ChangMin.
Había estado esperando que ChangMin le dijera que tomara el siguiente
vuelo a Miami, pero si el archivo era todo lo que quería, MinHo se aseguraría
que lo tuviera.
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